Autos chocolate en México. Ya hemos hablado de las dificultades que tiene el mexicano para comprar un coche nuevo, y desde hace muchos años adquirir un auto chocolate ha sido la oportunidad de adquirir un transporte propio. Pero, ¿qué son los coches chocolate, por qué se les llaman así y cómo afectan a los mexicanos?
Los altos precios de vehículos nuevos en México y las complicaciones para adquirir un crédito son las principales razones por la que millones de mexicanos no pueden comprar un vehículo nuevo en nuestro país, y han optado por comprar coches usados traídos desde Estados Unidos sin considerar que muchas veces no cumplen con los requisitos de seguridad ni con las regulaciones ambientales. A este tipo de vehículos importados del país vecino se les conoce en México como autos chocolate.
La Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA) afirma que los autos chocolate, que muchas veces tienen más de 20 años de antigüedad, son competencia desleal para los fabricantes nacionales y las empresas automotrices extranjeras que tienen su planta en México. Esto "tiene efectos nocivos sobre el mercado interno y genera una sobre oferta brutal de autos en circulación”, explica Edurardo Solís, presidente de dicho organismo.
La llegada masiva de autos usados “chocolate” han paralizado el comercio de automóviles nuevos en México, lo que se ha acentuado desde la entrada en vigor del Tratado de Libre Comercio con Estados Unidos y Canadá (1994). Antes solamente estaba permitido que circularan en las ciudades fronterizas y que contaran con un permiso especial.
Aunque las autoridades aseguran que el acuerdo ha beneficiado a otros sectores de la economía, la realidad es que la importación de autos chocolate no cumple con las condiciones estipuladas en el TLCAN, ya que la mayoría de los vehículos estadounidenses se compran mediante amparos judiciales.
Consecuencias de los autos chocolate en México
La consecuencia más alarmante es la pérdida de empleos generado por el decrecimiento de la industria automotriz mexicana. Otro problema es la repercusión que los vehículos chocolates tienen en el medio ambiente, la mayoría de los coches chocolates ya no pueden cumplir con la rigurosa normativa ambiental en Estados Unidos y encuentran en México una oportunidad para alargar su vida ofreciendo un precio accesible para aquellos mexicanos que no podrían pagar un coche nuevo o seminuevo salido de agencia.
¿Quienes hacen la importación de autos chocolate a México?
Los autos chocolate cuentan con toda una industria paralela: Reino Intermediario Única, Grupo Empresarial Yamve, Estructura Automtriz, Imex Servicios Aduanales y Grupo Estratégico en Comercio Exterior TJ, son los cinco grandes intermediarios que, mediante amparos, gestionan los trámites de importación para 200 empresas; las ganancias ascienden a 400 millones de dólares anuales.
Estos amparos permiten que estos intermediarios puedan pasar autos sobre el valor declarado en la factura del vehículo. De esta manera los vendedores independientes que no cuentan con el permiso de importación, acuden a los servicios de los cinco grandes, quienes a cambio de una comisión que varía según el modelo y el año del vehículo, cruzan el auto chocolate a través de las 19 aduanas fronterizas.
Las medidas gubernamentales que se han tomado como la del entonces presidente Felipe Calderón de “disminuir la entrada de vehículos obsoletos e incrementar las ventas de autos nuevos” no son viables debido al deficiente poder adquisitivo y a la débil economía del país. Los mexicanos no pueden comprar un auto nuevo y ven en los autos chocolate una oportunidad para adquirir un medio de transporte propio.
Fuente: http://mx.acelera.com
